Artículo anterior: Diagrama Bimanual
Después
de haber recopilado todas las informaciones pertinentes al método actual con la
ayuda de las herramientas de registro de informaciones, el siguiente paso es
analizar dicha información, con el
objetivo de determinar una manera mejor de realizar el trabajo.
Las
informaciones obtenida mediante los cursogramas
o diagramas son sometido a un análisis en procura de mejor la operación
o método de hacer el trabajo. Este análisis, la técnica del interrogatorio, es
el medio para efectuar el examen crítico, sometiendo la actividad que se
realiza a una serie sistemática y progresiva de pregustas.
En
este paso, debemos tener en cuenta de que es importante conocer las clases de
actividades registradas en cada uno de los cursogramas o diagramas. Conociendo
que existen cinco clases de actividades a registrar y que son: operación,
inspección, transporte, almacenamiento y demora y que podemos clasificarla en
dos categorías:
- - A la que la materia o subproducto se le
traslada o examina. Que son aquella que la materia o subproducto quede lista en
posición para ser trabajada o para modificarla (condición química o física) o
trasladada de posición ya sea retirándola de la maquina o área del trabajo.
- -
A la que la materia o subproducto se
almacena o es retenida en espera.
Es
importante señalar que el objetivo primordial en un análisis de trabajo es
lograr que se realice con la mayor proporción de actividades que generen valor
agregado.
Preguntas preliminares
El
objetivo fundamental del análisis del trabajo es el perfeccionamiento de los
métodos de trabajo, y la técnica del interrogatorio es el método de efectuar el
examen crítico sometiendo sucesivamente cada actividad a una serie sistemática
y progresiva de preguntas.
En
la primera etapa del interrogatorio se pone en tela de juicio, sistemáticamente
y con respecto a cada actividad registrada, el propósito, lugar, sucesión,
persona y medios de ejecución, y se le busca justificación a cada respuesta.
Preguntas de fondo
La
segunda fase del interrogatorio correspondiente, el investigador pasa a
averiguar que mas podría hacerse, y por tanto, que se debería hacer, es decir,
se profundizan las respuestas.
Las
preguntas de fondo son la segunda fase del interrogatorio: prolongan y detallan
las preguntas preliminares para determinar si, a fin de mejorar el método
empleado, sería factible y preferible reemplazar por otro el lugar, la
sucesión, la persona y/o los medios.
Combinando
las dos preguntas preliminares y las dos preguntas de fondo de cada tema, se
llega a la lista completa de interrogantes:
Propósito:
¿Qué se hace?
¿Por qué se hace?
¿Qué otra cosa podría hacerse?
¿Qué debería hacerse?
Lugar:
¿Dónde se hace?
¿Por qué se hace allí?
¿En qué otro lugar podría hacerse?
¿Dónde debería hacerse?
Sucesión:
¿Cuándo se hace?
¿Por qué se hace entonces?
¿Cuándo podría hacerse?
¿Cuándo debería hacerse?
Persona:
¿Quién lo hace?
¿Por qué lo hace esa persona?
¿Qué otra persona podría hacerlo?
¿Quién debería hacerlo?
Medios:
¿Cómo se hace?
¿Por qué se hace de ese modo?
¿De qué otro modo podría hacerse?
¿Cómo debería hacerse?
Estas
preguntas, en este orden, deben hacerse sistemáticamente cada vez que se
empieza un estudio de métodos, porque son la condición básica de un buen
resultado.
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